Gandienses levantaron su voz para condenar los delitos machistas

Un aproximado de un millar de personas, la mayoría mujeres, se manifiestan el miércoles en una "caminata nocturna" en repulsa por el último asesinato machista, el de Laura Luelmo, la mujer de 26 años hallada muerta el lunes pasado tras pasar varios días desaparecida en la localidad de El Campillo, en Huelva, Amdalucía.

"Tenemos derecho a salir por la noche sin tener que mirar de reojo", señala el comunicado leído por la periodista Puri Naya durante la actividad de rechazo a los feminicidios, reseñada por Levante-EMV.

Los gandienses expresaron a viva voz que esta sociedad ya no está dispuesta a tolerar el goteo de mujeres asesinadas en crímenes machistas y, por ello, la indignación que expresaron durante la caminata, que estuvo acompañada por muchos hombres quienes también manifestaron su repulsa al crimen machista de Laura Luelmo en Huelva.

La caminata, bajo el lema "Corremos sin miedo y no por miedo", fue convocada el martes por el Club de Atletismo Safor Delika Sport, pero en sólo 24 horas se sumó el propio Ayuntamiento de Gandía, numerosas entidades, clubes deportivos y colectivos, demostrando que la batalla para acabar con los asesinatos machistas no tiene color.

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La caminata nocturna para solidarizarse con Laura, que practicaba regularmente deporte, partió a las 19:30 horas desde la explanada del polideportivo municipal. Allí ya eran cientos las personas pero a medida que discurría la marcha hasta la plaza Mayor todavía se sumaron más personas.

Para el momento de llegar ante el Ayuntamiento de Gandía, donde se leyó el comunicado de protesta e indignación, y se reiteró la solidaridad con esta última víctima, ya eran cerca de un millar los asistentes, entre quienes se encontraban la alcaldesa, Diana Morant, la vicealcaldesa, Lorena Milvaques, y los concejales Vicent Gregori y Ciro Palmer.

Antes de pedir un minuto de silencio por Laura, la periodista Puri Naya leyó el comunicado final en el que se exigió que se desplieguen todos los medios y medidas necesarias para garantizar la seguridad de las mujeres.

“Tenemos derecho a poder salir por la noche, o por la mañana, o a cualquier hora, sin tener que mirar de reojo, sin tener que pensar que estamos haciendo algo peligroso. Porque cada vez que nos pasa algo se analiza cómo íbamos vestidas, o la gente se pregunta por qué íbamos a esas horas por ese o aquel lugar. ¡Ya está bien de juzgarnos y de no mirar donde está realmente el problema!”, sostuvo Puri Naya.

También una representante de la Asociación Rosa de los Vientos, que trabaja con mujeres que han sido víctimas de violencia machista, exigió el fin de esta lacra.