Gandía se debe sentir orgullosa de contar entre sus habitantes a uno de los galardonados con uno de los accésits del Concurso Internacional de Paella Valenciana de Sueca.
Se trata de Ignacio Hernández, quien hace varios años partió desde su natal Gandía; hacia tierras australianas con el objetivo de aprender inglés. Sin embargo, el destino le tenía deparada otra suerte, gracias a sus conocimientos en la elaboración de la verdadera paella valenciana.
Sus comienzos en el país de los canguros no fueron precisamente aprendiendo inglés, sino que fue la cocina la que le abrió las puertas al mundo laboral. Allí le regalaron un caldero, que luego completó con la paellera marcando el comienzo de su futura carrera como representante del plato típico valenciano al otro lado del mundo.
Luego de varios años en los que ya se han contado más de 4 mil paellas, Hernández edificó su empresa gracias a la experiencia adquirida al impartir master class de paellas y varios cursos de cocina realizados en los que debido a su origen valenciano “…llevaba la medalla de paella colgada”.
El joven empresario cuenta que ha tenido que enseñarle a los australianos cómo se elabora una verdadera paella valenciana ya que “…aquí la maltratan bastante, le ponen chorizo o champiñones, arroz con cosas”.
Hernández se enorgullece de elaborar la auténtica paella con los ingredientes básicos originales, aunque confiesa que el “garrofo”, es muy complicado conseguir por esos lados.
Conjuntamente con su socio en la empresa, el también valenciano Jorge Belenguer, estuvieron recogiendo el premio en Sueca para emprender de nuevo su regreso a Australia y seguir dejando en alto el nombre de Gandía representado en la verdadera paella valenciana.
Actualmente Hernández es el propietario de una empresa de catering y eventos en el país oceánico donde el plato típico valenciano es el centro de todos los pedidos, aun cuando el fideuà de Gandía también se encuentra dentro de las exquisiteces que ofrece su premiada cocina.