Una manada de jabalíes penetró la noche del martes, en el pequeño campo de golf de la playa de Gandía, ubicado junto a la urbanización de Sant Nicolau, causando destrozos en buena parte de las instalaciones.
Por si esto fuera poco estos cerdos salvajes, que por cierto tienen una superpoblación, poseen unas pezuñas tan grandes y largas que provocaron hoyos, los cuales dificultarán la reparación de la grama del campo.
El presidente del Club de Golf Gandía, Ricardo Arocas, informó que fue una arboleda el punto flaco por el que penetraron los animales, a través del Camí Vell del Grau.
El asunto es que destrozaron dos de los seis «greens», que quedaron inservibles para la práctica del golf, afectando a los deportistas de la localidad.
Hace meses que se ven estos animales por algunas carreteras y calles del Grau y la playa de Gandía, pero es la primera vez que entran en el campo de golf.
Las medidas para atajar la plaga de jabalíes está en manos de la Generalitat.
Lo que dicen los expertos
Esta es una especie que carece de depredadores naturales, no causaría tantos problemas si se mantuvieran limpios los cauces de ríos y barrancos, un hábitat en el que encuentran refugio y espacios para desplazarse.
Ya el problema se extiende a otras áreas, pues se producen accidentes de tráfico por la presencia de jabalís, hasta el punto de que en algunos lugares se recomienda máxima precaución cuando se conduce de noche para poder esquivar su presencia en las carreteras.
Mire cómo han dejado el campo, ¡qué desastre!