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En apenas una semana, se registra en Gandía otro caso de violencia contra la mujer protagonizado por una pareja de ancianos.
En esta oportunidad se trató de un hombre de 70 años, quien al parecer está padeciendo de una enfermedad terminal, y su esposa de 63 años, quien se convierte en una nueva víctima de la violencia machista en la capital de la Safor.
La Policía Local acudió este miércoles 6 de febrero a un domicilio del Grau, luego de que la mujer llamara a emergencias para denunciar las agresiones de su marido.
Al llegar los funcionarios policiales, la víctima confesó que su marido la agredía habitualmente y que algún día acabaría matándola.
La mujer fue atendida por familiares, mientras que el agresor – que se encontraba en la cama –, tuvo que ser trasladado al hospital de Gandía por su grave estado de salud. Allí permanece detenido a la espera de que pueda ser trasladado hasta el juzgado para que éste determine su condición.
Los agentes preguntaron a la señora si quería presentar denuncia contra su marido y ésta confesó que tenía miedo de que, pese a su delicada salud, acabara con su vida. No fueron revelados los nombres de víctima ni victimario.
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El pasado 30 de enero, un hombre de 75 años de edad, fue detenido por funcionarios policiales luego de que intentara lanzar a su mujer de 73 años, por las escaleras del edificio donde viven en la calle República Argentina de la capital de La Safor.
Ese día los hombres de ley recibieron una llamada telefónica de los vecinos de la indefensa mujer que gritaba pidiendo auxilio.
Al parecer, el anciano – que estuvo a punto de cometer un uxoricidio –, se encontraba bajos los efectos del alcohol. Sin embargo, según relataron la víctima y los propios vecinos del matrimonio, esta no era la primera vez que el hombre agredía a su pareja.
El hecho se suscitó en horas del mediodía cuando el agresor forcejeó con la señora y la arrastró hasta el borde de las escaleras del edificio que habitan en la calle República Argentina.
Cuando llegaron los funcionarios policiales, el agresor corrió y se refugió en la vivienda. No obstante, los agentes lo detuvieron y fue conducido ante el juzgado de violencia contra la mujer de Gandía.
También relataron la víctima y los testigos que los malos tratos del agresor machista no solo se producían desde hace tiempo, sino que él mismo llegaba a autolesionarse para inculpar a la mujer.
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