¡Fin de mundo! Una minuciosa investigación realizada por agentes de la Policía Nacional dejó al descubierto las intenciones de una gentil abuelita que levantó una falsa denuncia para tratar de cobrar de manera indebida a la empresa de seguros por un supuesto robo.
Las investigaciones se iniciaron cuando una mujer de 80 años, de origen español, llamó al 112 y notificó que había sido víctima de un ladrón en el rellano de su edificio que le había quitado su dinero. De inmediato fue atendida por una patrulla policial en su domicilio donde ratificó la información inicial.
De acuerdo con reseña del suceso publicada por el medio digital somgandia.com, la anciana contó a los agentes que al salir del ascensor fue abordada por un hombre que tras empujarla le había registrado el bolso para sustraerle 300 euros. La denunciante fue atendida en el lugar por los servicios sanitarios aunque no presentaba lesiones físicas, y al día siguiente presentó denuncia por robo con violencia en la comisaría de Gandía.
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Los policías comenzaron las diversas comprobaciones que consideraron necesarias para tratar de dar con el presunto ladrón pero comenzaron a dar con cabos sueltos en la versión de la supuesta víctima que echaron por el suelo la historia del asalto. También llamó la atención de los policías que la octogenaria preguntara si ese hecho lo cubría el seguro del hogar.
Los agentes comprobaron que la mujer no había sufrido tal robo y que había perdido 300 euros mientras realizaba compras en un supermercado y su intención era dar cuenta a su seguro para tratar de recuperarlo.
Confrontada por los agentes que esclarecieron esta simulación de delito, la supuesta víctima reconoció posteriormente no haber sufrido tal robo sino que había perdido sin saber cómo los 300 euros por lo que pretendía recuperarlos dando cuenta a su seguro.