La Safor inició la semana con meteorología inestable marcada por chubascos y este lunes fue el viento el que causó los problemas en casi todos los municipios de la comarca, uno de los principales, el daño a buena parte de la cosecha de naranja que está en avanzado estado de maduración a la espera de ser cortada y comercializada y que traerá inconvenientes económicos a los productores.
Según datos oficiales y de estaciones meteorológicas situadas en la comarca, los vientos superaron los 100 kilómetros por hora en la cima del Mondúver, en los términos municipales de Jeresa y Gandía, y alcanzaron los 80 kilómetro por hora en áreas urbanas, en las que arrastró contenedores y mobiliario urbano y arrancó ramas de árboles en varios lugares.
Le puede interesar Pionera en Europa: Gandía gestionará suministro de agua por Internet
Una de estas situaciones ocurrió en la calle del 9 d'Octubre de Gandía, justo ante la puerta de acceso al colegio Joan Martorell, donde el vendaval arrancó de cuajo un árbol, afortunadamente un poco antes de la entrada al cole. Operarios municipales acudieron a media mañana para cortarlo y retirar los troncos que representaban un peligro para los alumnos y los transeúntes.
Desde la madrugada de este lunes los agentes de las policías locales de la Safor estuvieron muy atareados y tuvieron que atender decenas de casos, y recomendar que se aseguraran elementos que podían volar o caer a la vía pública, así como retirar los que invadían calzadas.
Por la tarde disminuyó la intensidad del viento, si bien para este martes la predicción de las estaciones meteorológicas de la comarca siguen alertando sobre rachas fuertes de poniente.